GUILLERMO DANGLADA

Matador de toros. 

Nació en Mazatlán, Sinaloa, el 19 de diciembre de 1888. 

Se vistió de luces por primera vez en Tepic, Nayarit, el 17 de julio de 1910. Se presentó la Plaza de toros El Toreo de la Condesa el 16 de septiembre de 1912.

Alternativa
Fecha: 13 de Abril de 1924
Lugar: México
Plaza de toros El Toreo 
Padrino: Rodolfo Gaona
Testigo: Luis Freg
Ganadería: Ajuluapan
Toro: "Caporal"

Se retiró el 17 de diciembre de 1933. 

Falleció en México el 22 de diciembre de 1979.

GUILLERMO DANGLADA: UN TORERO MAZATLECO

Por: Alfredo Ramírez Osuna
Publicado en "El Sol de Mazatlán" el 19 de diciembre de 2007.

Mazatlán, Sinaloa.- Muchas de las más grandes figuras tanto de las artes mayores como las menores, tienen muertes tristes. Algunos, en el peor de los abandonos. Mazatlecos ilustres no han sido la excepción.

Guillermo Danglada, fue uno de ellos.

Su nombre no dice gran cosa a los mazatlecos pero sí a los amantes de la fiesta brava, porque este paisano nacido el 19 de diciembre de 1888 en nuestra ciudad y puerto, cuenta con uno de los sitiales más grandes dentro de la historia taurina a la que se entregó por cuarenta años para después morir en un asilo en la más triste de las soledades.

Reza el viejo adagio que nadie es profeta en su tierra.

Hijo de un abogado y tenedor de libros que hablaba siete idiomas, Guillermo queda huérfano a la edad de cinco años. Estudió sólo la primaria.

En cierta ocasión en la plaza de toros Bellavista del antiguo Mazatlán, vio torear al sevillano Antonio Fuentes, lo que le dejó profunda huella, al grado de seguir la carrera en la fiesta brava como aficionado a torear en festejos para iglesias y colegios en la plaza Rea.

Se vistió de luces por vez primera el 17 de julio de 1910, con tan sólo 22 años, en la ciudad de Tepic, Nayarit, sin embargo, su primer cartel en una plaza de categoría, fue en "El Progreso" de la ciudad de Guadalajara en 1911.

Cuando el picador Miguel de la Guardia "Taquero" lo vio torear se lo llevó a la capital del país donde se presentó como novillero en el Toreo de la Condesa, el 16 de septiembre de 1912 al lado de otros grandes y destacados novilleros.

Llevó como banderillero a Ignacio Sánchez Mejías, quien en aquel entonces radicaba en la capital del país sin ninguna popularidad taurina, hasta muchos años después.

Poco a poco fue alcanzando popularidad y después de mucho bregar obtuvo la alternativa (última que diera en vida) de manos de Rodolfo Gaona, llevando como testigo a Luis Freg, con el toro "Caporal" de la ganadería de Ajuluapam, en la plaza "El Toro" en una corrida de beneficencia para los voceadores, el 24 de abril de 1924.

En el momento solemne, al cederle la estafeta, Rodolfo Gaona le dice: "Ojalá que con estos chismes obtengas tú, dinero, y tanta gloria como yo he obtenido, para felicidad de los tuyos".

A lo largo de sus bregas por el país y el extranjero Guillermo Danglada tuvo varios trofeos y también varias cornadas: una muy grave ocurrió en la ciudad de Querétaro al grado de que lo tuvo a las puertas de la muerte ya que dicha herida penetró desde la pierna hasta llegar a la ingle, dejándolo encamado por más de dos meses.

Duró algunos años toreando hasta que se despidió en la plaza Vista Alegre un 17 de diciembre de 1963 alternando con Francisco Tamarit "Chaves" con toros de Quiriceo. Ahí se despidió y vivió durante algún tiempo con la familia Valdez, hasta que ingresó a un asilo de ancianos, el Mundet, que se encuentra todavía ubicado en la Avenida Revolución, de la capital del país, hasta que murió un 22 de diciembre de 1979, sin que se le haya reconocido en Sinaloa como se merece.